C.C.L.
Una planta de tratamiento de basura orgánica, otra de residuos sanitarios, un "punto verde" y las usinas de Felipe Cardoso son las estaciones de un peculiar tour organizado por la IMM y que podría convertirse en aromática atracción turística.
Aunque la Ruta de la Basura ha cumplido ya seis años de implementada, por primera vez la Intendencia de Montevideo organizó un tour para la prensa. De aquí en más se piensa extender la actividad a turistas y personas de la tercera edad; por ejemplo, a los abuelos en la semana del 19 de junio, como lo explicó Lourdes Gadea, abogada asesora del departamento de Desarrollo Ambiental.
La idea, que bien podría parecer una broma, o un exceso, en realidad se prevé en un cronograma con variantes respecto a los destinos habituales.
En la agenda para los adultos mayores, no estará incluida como estación a visitar una planta de tratamiento de residuos hospitalarios, en donde es imprescindible ingresar con tapabocas, que en el propio lugar se proporcionan. Se anunció que sí se incluirá una recorrida por el vivero municipal, que queda junto a la planta Tresor, de tratamiento de residuos orgánicos.
El primer sitio que se presentó como de interés en la jornada de ayer, curiosamente fue un "punto verde", es decir un lugar en donde se encuentran volquetas a fin de que los clasificadores descarten los residuos que no les interesa o conviene vender. Dicho en pocas palabras, un sistema que ya desde la comuna se considera muy poco eficiente, después de las pruebas piloto efectuadas hasta el momento.
RESPONSABLES. No bien se detuvo el microómnibus que trasladaba a una veintena de periodistas locales, en un camino del barrio Capra, mientras dos o tres fotógrafos descendieron, los vecinos de la zona salieron a hacer reclamos explicando que recién ayer habían pasado a vaciar esos depósitos, después de semanas de retraso. Está de más contar que allí la detención no duró más de algunos minutos, mientras sólo fue un reportero gráfico de la propia Intendencia el que asumió la responsabilidad de prestar atención a las denuncias.
-¡Suban, suban, que estamos retrasados! -exclamó la doctora Lourdes Gadea, lo cual era cierto.
-Bueno, pero me vinieron a hablar y alguien tiene que escucharlos -respondió el reportero municipal.
-Está bien, pero vos no sos responsable -insistió con calma la doctora.
-¡Todos somos responsables! -comentó el reportero.
ESTACIONES. El siguiente paso del itinerario de la excursión, cuyo objetivo es explicar las diversas etapas de la manipulación de la basura, fue la visita a la planta de tratamiento de residuos orgánicos y su transformación en compost, en Tresor.
Se continuó por el reconocimiento de una planta de tratamiento de residuos sanitarios de gestión privada, arrendada en predio municipal. Y por último se concurrió a la zona de disposición final de los residuos, conocida como el vertedero municipal de Felipe Cardoso.
En la planta de Tresor se tratan materiales de diversa procedencia: residuos sólidos industriales, de origen agro-industrial (como restos de podas, hojas, cortezas, frutas y verduras o estiércol), y residuos de origen industrial (como lodos de empresas aceiteras o lecheras, pelos de curtiembres, tabaco, cigarrillos, chocolates, golosinas y otros productos vencidos).
Mediante técnicas que se detallaron en la visita guiada, el cometido de Tresor (unidad de la División Limpieza de la Intendencia) "es reutilizar desechos orgánicos logrando la reinserción en las cadenas productivas".
Según narró el agrónomo Daniel Basile, que oficiaba de guía, el llamado proceso de compostaje que allí se realiza produce un sustrato orgánico utilizable como fertilizante. La mano de obra de esta planta cuenta con seis funcionarios municipales y más de treinta de la ONG Acción Promocional, la cual recibe los plásticos, cartones o vidrios que no se emplean en los procesos de tratamiento de residuos. Este proyecto comenzó en 1997, y el predio se adquirió al año siguiente. En el ´99 comenzó una experiencia piloto con residuos generados en ferias y mercados. Y en 2000 empezó el trabajo con lodos de industrias y agroindustrias, desde curtiembres a lecherías o fábricas de refrescos. Ahora, partiendo de 6.000 toneladas, es posible producir 3.000 de fertilizantes. Esperan aumentar a 50.000 toneladas por año la cantidad de residuos orgánicos tratados.
El siguiente destino fue la planta de Aborgama. La tecnología utilizada allí para el tratamiento de los residuos sólidos hospitalarios contaminados se sustenta en los principios de la esterilización a través del proceso de autoclave. Entre otras etapas éste comprende el esterilizado con vapor durante 30´a 150 °C. Los residuos llegan en tarrinas plásticas de 15 kilos, provistas de tapa y suncho. Los productos resultantes son alejados para su disposición final en relleno sanitario operado por la Intendencia. En el entorno, un agrio olor, como a alpiste quemado, apresura el ascenso al micro.
Las aves de fiesta
En el vertedero de Felipe Cardoso, última estación del tour, llegan por día 700 camiones cargados de basura y se vuelcan 2.600 toneladas de residuos múltiples. Como abundan los alimentos, conviven en paz las aves rapaces o de rapiña con las inofensivas. Hay palomas, gaviotas y caranchos que si bien no afectan a la aviación, enfurecen a productores agrícolas del entorno.
El País Digital
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